Hablar de Sexualidad con Nuestros Hijos

Hablar de la sexualidad con nuestros hijos, una labor preventiva

Hoy en día los espacios de diálogo y comunicación en la familia se han perdido, porque no hay tiempo para ello, porque el correcorre del día a día, las jornadas laborales y las múltiples actividades que tenemos, nos hace que llevemos vidas en las que estamos menos presentes en las de nuestros hijos.

Que a su vez tienen sus múltiples ocupaciones, y sus preferencias en cuanto como y donde pasar su tiempo libre, que generalmente no incluye el estar con sus padres o hablar con ellos.
Muchas veces aunque todos estén es casa, cada uno está en sus propias actividades, y las posibilidades de interacción son mínimas, en muchos de los casos no conocemos las amistades de nuestros hijos ni lo que hacen cuando se divierten fuera de casa.

Pensamos que nuestro hijo, no hace o no llegaría a hacer las cosas que hacen los demás, pero estamos lejos de lo cierto.

Nuestro buen hijo, adolescente o preadolescente puede por presión de grupo, o porque todos lo hacen, verse envuelto en situaciones, como el fumar el tomar o tener relaciones sexuales prematuras, sin mucho conocimiento de lo que ello implica y sin una orientación adecuada.

Ni mucho menos de los cuidados que se deben tener a nivel preventivo, tanto si la idea es protegerse de enfermedades de transmisión sexual, como las relacionadas con cómo prevenir embarazos.

Se piensa en muchos de los casos que en la primera vez no se queda embarazada, o que eso no me ocurrirá a mí, con lo cual, no se toman las medidas de protección adecuadas, lo que en muchos casos y contrariamente a sus pensamientos, termina el embarazo termina siendo una realidad.

Es un tema que no es fácil de abordar, tanto si son ellos los que nos quieren preguntar, como si somos nosotros mismos, los que queremos encararlo.

Contamos con no pocos tabúes y estereotipos que nos impiden hablar claramente sobre lo que debe o no hacerse y cómo hacerlo, pensamos que las clases de educación sexual que brinda el colegio, pueden despejar todas las dudas acerca de la sexualidad y todo lo concerniente a ello.

Pero no es así, y los chicos buscan información con personas que no pueden tampoco llegar a solucionar las dudas.
Hablar sexualidad con los hijos, debería ser un tema que se trate en familia, poderles explicar sobre métodos anticonceptivos, sobre lo que implica una primera relación sexual, a nivel emocional, y físico, así como el respeto y la dignidad por nuestro cuerpo.

Muchas veces los adolescentes tienen relaciones sexuales en momentos que no son los más adecuados, o que no están preparados para ello, o con la persona no indicada, lo que puede lastimarlos emocionalmente, y dejarles gravada una mala experiencia que muchas veces los acompaña a lo largo de su vida, generando sentimientos negativos e incluso en algunos casos dudas acerca de su identidad sexual, o menoscabando su autoestima.

Como padres debemos estar pendientes de lo que ocurre con nuestros hijos dejar las puertas abiertas para el diálogo, generando oportunidades para que nuestros hijos expresen sus dudas y sientan nuestro apoyo en esto.

Una labor preventiva suele ser en muchos casos mucho más eficiente que tomar medidas cuando nuestras hijas nos cuentan que están embarazadas.

Se trata de generar una actitud positiva frente al cuerpo y la sexualidad, viviéndola desde el respeto y la protección.
No es una educación rígida y represiva los que asegura, que mi hija no llegue a tener relaciones sexuales si no que en muchos casos puede por el contrario llevarla a querer probarlo en un momento inadecuado, o con la persona inadecuada sino que además puede llegar a originar actitudes negativas frente a su cuerpo, y frente a su sexualidad adulta.

Es importante dar nuestro apoyo de padres incluso antes de que este tipo de situaciones se presenten
 

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Diana Ohana.